Actualmente, hay muchas iniciativas para fomentar la inclusión e implementarla en sus procesos, como el reclutamiento de personal. A pesar de ello, aún hay empresas que no tienen a colaboradores con alguna discapacidad, debido a que las prácticas inclusivas no las tienen como prioridad. Afortunadamente, son cada vez más los negocios que se alinean a la responsabilidad social y contratan a este tipo de talento.
¿Quién es una persona con discapacidad?
Es aquella que tiene alguna condición física o mental y que, al interactuar con el entorno, topa con varias barreras que impiden que participen en la sociedad de forma plena y efectiva y en igualdad de condiciones. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que son más de 1,000 millones de personas que presentan alguna discapacidad, es decir, el 15% de la población global. Esta cifra aumenta, debido a los casos de discapacidades por vejez o enfermedades crónicas.
Para que las personas discapacitadas vivan de manera independiente y sean participantes activos de su comunidad, los gobiernos han implementado medidas para que mejore su situación en materia de derechos, de modo que sean incluidas en lo laboral y, de esta manera, se evite la discriminación. Si bien se pensaba que tenían limitaciones, el tiempo ha demostrado que son un valioso talento y son cada vez más las empresas que buscan su apoyo. Esto se debe principalmente a cuatro razones, que describiremos a continuación.
Son personas innovadoras y creativas
Las personas discapacitadas, ante la falta de un sentido o capacidad, suelen desarrollar otros, lo que las vuelve muy creativas e innovadoras. Si bien pueden desarrollar productos originales y complejos, las empresas no son conscientes de lo que pueden hacer e, incluso, no creen que tengan talento. En realidad, pueden innovar en cualquier área de negocios y en cualquier nivel de puesto, incluso las altas direcciones. Encontrarlas puede ser difícil, pero con ayuda de una empresa de reclutamiento de personal que aplique pruebas especiales, será fácil dar con ellas.
Optimiza el clima laboral
Al integrar a personas con discapacidad se da una casi inmediata mejora en el ambiente laboral. Por ejemplo, cambia la actitud de los empleados y comienzan a eliminarse prejuicios y estereotipos que pueden ser hirientes. Esto resulta de la perseverancia y responsabilidad que desarrollan tales individuos. Notarán también que la discapacidad se reduce cuando la persona con la condición adquiere la capacidad de decidir sobre su vida, además cuando cuenta con recursos económicos, experiencia, tecnologías, nuevos conocimientos, entre otros.
Sensibilización del personal
Cuando se trabaja diariamente con personas con discapacidad, el resto de personal comienza a sensibilizarse con ellas, lo que contagia poco a poco hasta que toda la empresa se muestra como incluyente y refleja al público valores como no discriminación y tolerancia a la diversidad.
Es importante que sean contratadas con un buen proceso de reclutamiento de personal para garantizar su adecuación no solo en el equipo, también en el puesto.
Reduce el ausentismo y genera mayor compromiso
Los empleados discapacitados son bastante tranquilos y no son conflictivos. Además, al recibir una oportunidad de trabajar para apoyar a su familia evitan el ausentismo laboral. Conocen muy bien su condición y han enfrentado lo difícil que es encontrar trabajo por su condición, por tal motivo se comprometen más que el empleado promedio, son más fieles a su puesto y se aseguran de ofrecer servicios de la más alta calidad.
También suelen aferrarse a su puesto, especialmente cuando son bien tratados, lo que evita las rotaciones, los gastos en capacitación y el largo proceso de reclutamiento de personal. Es importante que la inclusión sea un proceso que incluya una igualdad de condiciones en actividades, horarios y salarios.
Permite contar con personal eficiente en ciertas tareas
Ciertas personas discapacitadas cuentan con características especiales que permiten colocarlas en sitios o ejercer operaciones donde no podría una persona sin discapacidad. Un ejemplo, son aquellas con problemas auditivos, que pueden operar en tornos con altos niveles de ruido sin que ocurran accidentes laborales. Otro ejemplo son los individuos con síndrome de Down, que son muy buenos para realizar actividades repetitivas.
En el caso de personas con dificultades físicas o motoras, son muy buenos para realizar tareas en las que es necesario pasar largas horas en un solo sitio. Por último, las personas con discapacidad visual pueden trabajar mejor en sitios oscuros que el resto de las personas.
Mejora la imagen de la empresa
Todo negocio depende de su imagen. Una buena estrategia para mejorarla, no solo en lo exterior, sino en lo interior, es implementar la inclusión de personas discapacitadas con la ayuda de una empresa de reclutamiento y selección de personal. Su presencia hace que todo el personal desarrolle un orgullo de pertenecer a un negocio que respeta e incluye a otros.
Eviten caer en los mitos y prejuicios sobre la contratación de personas con discapacidad. En Humaniq, podemos ayudarles para que tengan el mejor talento y sean verdaderamente inclusivos. Soliciten más información sobre nuestros servicios de reclutamiento al (55) 4123 4131.